LOS UCRÓNICOS DE MARÍA ANTONIA GARCÍA DE LA VEGA

 

 

Según el diccionario de la RAE, la Ucronía es una reconstrucción histórica construida lógicamente que se basa en hechos posibles pero que no han sucedido realmente. Por lo tanto un hecho, objeto o individuo ucrónico sería aquel que aun pareciendo real debido a su aspecto se sitúa fuera del tiempo o espacio que le correspondería o simplemente no es cierto. La ucronía es bien conocida por los escritores, pues se trata de un recurso literario que propone una reconstrucción alternativa de la historia, basándose en eventos que, si bien nunca sucedieron, pudieron haber ocurrido si los acontecimientos hubieran tomado otro sentido. 

María Antonia García de la Vega y Pío Cabanillas

María Antonia García de la Vega, quien hasta ahora nos tenía acostumbrados a desarrollar su trabajo en entornos abiertos de la naturaleza, ha cambiado su modus operandi para reunir en un fantástico libro una colección de retratos en blanco y negro, realizados en estudio, inspirados en el arte y la pintura de épocas pasadas, que podrían incluir un lapso de tiempo transcurrido entre los siglos XVI y el XIX. Así sus personajes, en los que los propios fotografiados se diluyen, podrían pertenecer tanto al Renacimiento como al Manierismo o al Romanticismo, entre otros estilos pictóricos.

Una de las curiosidades que presenta el volumen es que la mayoría de los 116 retratados son personas del entorno de María Antonia, compañeros fotógrafos como ella y miembros destacados del ámbito cultual. Sin embargo al contemplar las imágenes logramos retrotraernos a la época que representan, olvidándonos de la persona real, y si en aquel entonces hubiesen existido las cámaras fotográficas no dudaríamos ni por un momento de que los retratos fueron realizados en dicho momento del tiempo. Y es que la autora ha sabido captar la esencia de los retratados para transformarlos en personajes anacrónicos, extemporáneos pero a la vez ciertamente reales. Basándose no solo en el aspecto físico, sino también en la personalidad y los intereses de cada uno de ellos ha compuesto un variopinto círculo de caballeros plasmados en estampas fotográficas que podrían estar presentes en cualquier pinacoteca de prestigio si de lienzos se trataran y que sin duda no desentonarían en ningún museo, tanto nacional como internacional.

Antonio Pérez del Río y Javier Barón

El libro ha sido prorrogado por Javier Barón, Jefe de Conservación de Pintura del siglo XIX del Museo del Prado, que estuvo presente en la el acto convocado para su presentación. También formaron parte de las personas que acompañaron a María Antonia en la tarima Antonio Pérez del Río, director de la Escuela LENS de Artes Visuales y Pío Cabanillas Alonso, antiguo director de Radio Televisión Española, entre otros cargos.

 

Todos aquellos interesados en adquirir un ejemplar del libro podrán hacerlo a través de la página web de la autora:

 MARÍA ANTONIA GARCÍA DE LA VEGA

LA FÁBRICA RECOGE EL UNIVERSO CREATIVO DE CANDELA CORT

 

Como ella misma confiesa, Candela Cort (Madrid, 1959) llegó al sombrero por casualidad, pero a lo largo de su trayectoria ha construido un universo creativo donde el juego y la alegría presiden unos diseños que retan a quien los viste.

 

El último libro de La Fábrica recoge este universo creativo a través de imágenes de algunos de los diseños más icónicos de Cort. Propuestas que van desde sombreros a tocados, cuellos, pulseras, collares e incluso collages.

 

Como señala la periodista Anatxu Zabalbescoa: “Las obras de Candela Cort vuelan apoyadas. Sus sombreros tocados y collares son livianos, casi etéreos y, sin embargo, también son rotundos. Tienen capacidad para transformar.”

Cort trabaja con todo tipo de materiales, desde radiografías, a botones, medias, cartón, alambre, plástico y goma elástica. Materiales “nobles” por su sencillez y poco precio que la diseñadora transforma y a los que da una nueva vida.

 

Y es que el universo de Candela Cort se basa en la alegría y el juego, un juego en sus diseños que a su vez retan y transformar a todo aquel que los lleva. El juego se ha convertido en su profesión y cada uno de sus diseños aflora y despliega al máximo su personalidad en cada una de las personas que lo viste.

 

Candela Cort ha llevado la originalidad de sus sombreros y otros diseños por todo el mundo, incluidas las salas de museos como el Reina Sofía de Madrid, el Museo del Traje, el Museo de Balenciaga en Guetaria y otras importantes galerías de arte. Ha trabajado y colaborado con diferentes artistas, como Eduardo Arroyo, además de participar en espectáculos teatrales, cinematográficos y musicales, como el realizado para la ópera O Corvo Branco, de Bob Wilson.

 

Durante el mes de noviembre el showroom MINIM Madrid (Paseo de la Castellana 92) acogerá la exposición Tocados por el arte, primera exposición retrospectiva de Candela Cort.